Vara, autorretrato en w.c.
Incierto destino asfixiado.
Incierto destino asfixiado en un mar de dudas
Razonablemente coherentes;
Infiernos a medida en miles de vidas prefabricadas,
Prestadas por la Atroz Máquina de la SuerteMuerte…
…el camión de los cerdos aparcado en la oscuridad del callejón,
Donde amantes furtivos juegan a brutalidades emocionales
De saldo.
Las sirenas de las ambulancias
Ya no parecen interesar a nadie;
Hoy es un día que decide tumbarse panza arriba
Con la boca abierta en un gesto de furiosa resignación…
“¡EL FIN DEL MUNDO SE AVECINA!”- grita un desgastado borracho,
Mientras unas monjas apresuran el paso
Para ser engullidas por una iglesia abrumada por el tedio
Y el suicidio masivo de las viejas creencias.
Incierto destino asfixiado en un mar de dudas
Razonablemente coherentes;
Vidas patéticas asomadas a las ventanas del manicomio
De la realidad…
Y por la puerta de atrás escapando
Un Satanás de tres al cuarto sube en una limusina gris,
Como el cielo un instante previo al aguacero
De cuchillas de miseria,
Que afiladas y voraces,
Resbalan espesas a través de todos los sumideros…
…donde el mal cohabita con la incertidumbre,
Allí donde los dioses de la peste
Negocian nuestros asfixiados e inciertos destinos.
Incierto destino asfixiado en un mar de dudas
Razonablemente coherentes;
Infiernos a medida en miles de vidas prefabricadas,
Prestadas por la Atroz Máquina de la SuerteMuerte…
…el camión de los cerdos aparcado en la oscuridad del callejón,
Donde amantes furtivos juegan a brutalidades emocionales
De saldo.
Las sirenas de las ambulancias
Ya no parecen interesar a nadie;
Hoy es un día que decide tumbarse panza arriba
Con la boca abierta en un gesto de furiosa resignación…
“¡EL FIN DEL MUNDO SE AVECINA!”- grita un desgastado borracho,
Mientras unas monjas apresuran el paso
Para ser engullidas por una iglesia abrumada por el tedio
Y el suicidio masivo de las viejas creencias.
Incierto destino asfixiado en un mar de dudas
Razonablemente coherentes;
Vidas patéticas asomadas a las ventanas del manicomio
De la realidad…
Y por la puerta de atrás escapando
Un Satanás de tres al cuarto sube en una limusina gris,
Como el cielo un instante previo al aguacero
De cuchillas de miseria,
Que afiladas y voraces,
Resbalan espesas a través de todos los sumideros…
…donde el mal cohabita con la incertidumbre,
Allí donde los dioses de la peste
Negocian nuestros asfixiados e inciertos destinos.
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